En un ámbito como el sanjuanino, con solo nombrarlo se sabe quién es. En otros lugares donde el ciclismo no es pasión hay que explicar que es, algo así como, el Messi del ciclismo en Ruta.
Ex tricampeón del mundo, seis veces ganador de la malla de puntos (metas sprinter) del Tour de Francia, clasicómano por excelencia, el eslovaco Peter Sagan, que el sábado cumplirá 29 años y prometió darse el permiso de brindar por ello; será una de las figuras excluyentes que tendrá la trigésimo séptima edición de la Vuelta a San Juan.
Reconociendo que aún tiene el sueño cambiado y tratando de recuperarse lo antes posible, no deja de dibujar una sonrisa cuando regala una foto con los aficionados que, respetuosamente, lo acosan.
«Es muy lindo y disfruto del cariño del público (tifoso)», dijo en perfecto italiano, este hombre que por segunda vez viene a la Argentina, pues disputó el Tour de San Luis en 2016, vistiendo su casaca de campeón mundial, título logrado en Richmond, Estados Unidos, el año anterior. Un segundo puesto, detrás de Fernando Gaviria y dos cuartas colocaciones, cerraron su participación en la carrera puntana.
Cuando se le consultó que, si por la media montaña sanjuanina, se anota para pelear la general, movió su cabeza horizontalmente realizando el internacionalmente reconocido gesto de negación y dijo: «Estaré bien para buscar las etapas al sprint, la montaña no es lo mío».
Contó que ha practicado muchos deportes, desde fútbol («calcio») hasta hockey y que también ha realizado distintas actividades de manera aficionada. Luego de explicar que le gusta pasar el tiempo libre con la familia y los amigos y que es poco afecto a mirar el fútbol por la televisión, dijo que al ciclismo llegó porque su «fratello» comenzó a practicarlo y le gustó.
Durante tres años subió al podio del mundial de MTB en categoría junior. Luego de coronarse campeón decidió pasar al ciclismo en ruta. «Lo que más me costó fue adaptarme a la distancia de las carreras, en el MTB eran cortas y explosivas en la strada (ruta en italiano) superaban el centenar de kilómetros».
El alemán Jan Ulrich, uno de los grandes rivales que tuvo Lance Armstrong, fue su ídolo de «ragazzo», contó quien para luego de La Vuelta irá a Sierra Nevada (España) para trabajar en altura y llegar con la preparación ideal a la clásica «Tirreno Adriático» que se corre en marzo.
Info y Foto: Fabio Garbi – Diario de Cuyo
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