El actual panorama de la Milán-San Remo 2020 no es nada optimista. Y es que el primer Monumento de la temporada podría sufrir una alteración del recorrido o incluso cancelarse debido al estado de la famosa subida al Poggio, tradicional ascensión que define el resultado de la carrera.
Tal es el desconcierto que el propio alcalde de la localidad de San Remo, Alberto Biancheri, ha confirmado que reparar los deslizamientos de tierra que han causado daños al Poggio asciende a una cantidad de 10 millones de euros. Por semejante coste, tal y como confirma el diario belga La Dernier Heure, el trabajo podría verse retrasado a solo tres meses del comienzo de la prueba. RCS Sport, empresa organizadora del evento, reanudaría los trabajos de reparación con su propio personal para que todo esté en perfecto estado el próximo 21 de marzo.
«La situación geológica de esa área siempre ha sido crítica, desde el siglo XIX. Durante unos días nos vimos obligados a detener el tráfico de los residentes, pero ahora la situación ha vuelto a la normalidad, aunque está claro que debe ser monitoreada constantemente. ¿Estaremos en riesgo? En este momento, no, pero debemos esperar que las condiciones climáticas nos ayuden», explicó Alessandro Sindoni, consejero de turismo de la zona, al portal Tuttobici.
Veremos si la situación da un giro de 180º para que hombres como Julian Alaphilippe, vigente ganador de la carrera, y Philippe Gilbert, busca ganar el último Monumento que le queda a su palmarés, garanticen espectáculo del más alto nivel en la próxima edición de Milán-San Remo.
Info: AS
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